Reir es gratis, hacer reir es muy caro.
Con esa consigna se ha vueto de un viaje algo largo pero mil veces mas grande en experiencias.
La risa, carajo la risa que dificil es que se creé, pero que triste es la vida cuando falta, reir es un acto tan esporadico y tan propio del ser humano que al parecer genera en nosotros tantos cosas buenas que recomiendan hacerlo todos los dias, quien no ha sentido placer en reir tanto que te duela el estomago, pues bien eso es lo que siento ahora.
Las palabras realmente son lo que nos hace reir, ebocar situaciones, personas y locuras, eso que hemos perdido por las comunicaciones, eso es la palabra, un gran maestro me dijo en una ocacion que la escritura es muerte, es un acto culminatorio de quien eres en ese momento, pero la palabra; la palabra es una construccion permamente de ti mismo, las letras no discuten con nadie estan fijas y son ultima palabra pero con un dialogo en esa doctrina perpetua de Hegel se construlle todo un nuevo mundo, que facil es decir lo que pensamos pero que dificil es que la otra parte entienda el espiritu de ello, tenemos limites al expresarnos y estamos muertos de miedo de no encajar, pensamos en cada acto palabra y accion que haremos, y bueno al final siempre somos quien realmente somos, de eso me di cuenta en otro pais, que pienses lo que pienses saldra a flote lo que eres; tonto, irracional, neurotico y paranoico pero melancolico y pacional que grandioso cumulo de personas somos todos y que conviven en aparente armonia en cada uno de nosotros
Quien poco lee y poco besa de a pocos olvida una cosa para llegar a la otra, que palabra tan ciertas; leer a alguien o leer de alguien son cosas distintas, de alguien es un referente, un esboso una aproximacion a quien es, pero leer a alguien. Leer toda su persona, cada gesto cada movimiento, Dios eso es sublime porque por cada cosa entenderas algo nuevo.
La Oralidad (con mayuscula porque es nombre propio de un acto hasta divino) nos desnuda, nos enfrenta a nosotros al tratar de abrir la boca y decir lo que esta en nuestro interior, es paradojico que hable de oralidad sin oralidad pero quiero dejar para mi eternidad esto que siento plasmado en letras.
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